SEROMA

Volumen 1 Número 1 Junio 1998

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SEROMA

 

Luis Carvajal Huerta.  Dr. Abel Castillo.

Guayaquil – Ecuador.

 

Introducción

Lapins y odon en 1982 (1) describen una curiosa afección localizada en las fosas escafoide y triangular de la oreja  caracterizado por un aumento de volumen de las citadas zonas que según los autores es ocasionado por un edema de causa desconocida. 

Una tumefacción de causa desconocida que borra la fosa triangular de la oreja, carente de signos de inflamación por tanto asintomátia  ha pasado desapercibida  por mucho tiempo sin que sea mencionada en textos de  otorrinolaringología  y de dermatología Lapins y Odon  hacen notar este hecho y sospechan que el líquido seroso  que se drena de la misma provenga de un intenso edema acumulado en la zona y no de una cavidad quística.   El líquido evacuado no es sanguinolento, es de color claro,  seroso, siendo esto la razón del nombre  seroma que le adjudicaron los mencionados autores.    Nosotros en el  departamento de dermatología del Hospital  Luis Vernaza hemos atendido 5 pacientes afectados  por este problema clínico a todos los cuales se les practicó biopsias de esas lesiones.  Tres de ellos no conocían la causa de su mal. Sólo un paciente atribuía como  causa de su mal al roce constante que sufría su oreja por efectos de su profesión.

 

 

Reporte de casos

Casos 1 y 2 

Dos hombres de 34 y 42 años de edad presentaban un proceso aparentemente edematoso en la parte suprior del pabellón auricular izquierdo  que anulaba la fosa triangular y el antihélix.   La piel que cubría las afecciones no era eritematosa ni caliente y los pacientes no sentían ningún síntoma ni presentaban adenopatías regionales.  Las punciones de las tumefacciones permitió drenar un líquido claro no hemorrágico.  Los pacientes no pudieron dar una explicación válida de su causa.  El estudio histopatológico demostró  a la epidermis normal.  En la dermis se observó un discreto edema que no explicaba el contenido líquido que drenó después de la punción.

Caso 3.-   hombre de 36 años quien presentaba  un gran abultamiento fluctuante inflamatorio de su oreja derecha atribuible según el enfermo al trauma que sufría su oreja por su profesión.  La punción de la tumefacción, drenó un líquido claro amarillento.

Caso 4.-  hombre 33 año, campesino, quien consulta  por una  hinchazón  eritematosa que borra las fosas superiores  de su oreja izquierda de 10 días de evolución. No da explicaciones sobre su causa.  Drena líquido de color amarillo a la punción.  La biopsia reveló que la epidermis y dermis eran normales salvo un leve edema de la misma.  En los límites dermo – hipodérmicos existe  una banda hialinizada  eosinofílica  cfon células poco diferenciadas que servía como techo de una cavidad.  Es posible que esa banda correspondía  al pericondrio  del cartílago.

Caso 5.-  hombre de 30 años a quien sin ninguna justificación se forma en cada una de las orejas tumefacciones suaves que al ser puncionaas drenan líquido claro y seroso.  Son diagnosticadas como serona.   La de lado izquierdo es curada con punciones repetidas y apósitos de presión, más la del lado derecho se  endurece y a los 3 meses la biopsia demostró que la dermis reticular estaba ocupada por una formación cartilaginosa de tejido maduro, sin atisbos de malignidad.

 

COMENTARIO

El estudio original de Lapins y Odon sostiene que el seroma es una afección edematosa asintomática de causa desconocida localizada en la fosa triangular del pabellón auricular con contenido líquido que provendría de un intenso edema de la zona.  Aunque no practicaron biopsias de las lesiones, basan su suposición en la facilidad de penetración de la aguja  que no encontró la resistencia que ofrecería el techo de un quiste intracrtilaginoso. No identificaron ningún agente  causal físico, químico u otros. Sin embargo, los autores citan a Engle quien en 1966, describió en los chinos pseudoquistes auriculares.  Estos  hechos, unidos a la obsevación en nuestras biopsias que el edema en la dermis no es tan intenso que explique la cantidad del líquido  evacuado y a los hallazgos histopatológicos del caso 4 de nuestra casuística, donde se encontró unamembrana hialina pericondrial en la  profundidad de la dermis que servía como techo de una cavidad, nos lleva a la consideración que el seroma es realmente un aquiste intrcartilaginoso y más todavía que en ciertos casos puede ser la fase previa  de un condroma  auricular tal como sucedió  en el paciente 5 quien presentó  un seroma en su oreja izquierda y un condroma en su oreja derecha, e4l cual se había iniciado con todas las características del paciente 3 quien manifestó que la causa  de su afección fue traumática.  En el diagnóstico diferencial debe considerarse a procesos inflamatorios y tumorales que afectan a la oreja.  Entre los primeros debemos citar a la  policondritis recidivante, enfermedad sistémica que inflama las  estructuras cartilaginosas, especialmente las de las orejas, nariz, tráquea, articulaciones costocondrales, etc.  Cuando afecta las orejas estas se presentan rojas edematosas y dolorosas (2).  La condrodermatitis nodular  crónica del hélix es sólo una inflamación focalizada  del hélix.   Finalmente citaremos un tumor que por su nombre y su localización en la oreja puede ser objeto de confusión. Nos referimos al Ceruminoma (3) tumor de las glándulas  ceruminosas apócrinas.  Sus nódulos se localizan  en la base del conducto auditivo externo.

En suma el seroma de acuerdo a nuestra opinión es una cavidad quística auricular  debida probablemente  a traumas o roces continuos sobre el pabellón de comienzo súbito e inadvertido que en ciertos casos puede ser causa de condroma auricular.

 

REFERENCIAS

1.-  Lapins N.A. Odon R.B. Seroma of the Auricle.  Arch Dermatol 1982.

2.-  Cordero A. Cobreros M. Allevato M. Donatti J. Policondirits recidivante crónica.  En : manifestaciones  cutáneas de las enfermedades sistémicas.  Atlas  Color y Texto.  Editorial médica Panamericana. 1997.

3.-  Neldner K.  Ceruminoma Arch Dermatol 98: 1968.